Presentación "Huellas" 2016

Con Graciela Ferrari

Con Omar el Grande, mi profe de Literatura,un maestro de toda la vida

Lectura de poemas ¡Gracias Mara!

El Lolo leyendo un poema ¡Gracias Hijo!

El más benjamín, Titi para los íntimos, Lucio para todos
¡Gracias hijito!

Firmas a gente que se acercó a la presentación
¡Muchas gracias!

Las chicas del secundario: Fany, Silvia y Silvina
¡Gracias!

¡Gracias Romi por venir!

Más firmas

Mis dibujos y libros en la presentación

¿Y este Señor? ¡un amor!... Mi amor
Gracias por todo

Esperando el arranque

Familia babosa: Hermano,Tía y cuñada

Más firmas

GRACIAS

Con mis huellas mas vitales

Glo, a cargo de un poema extenso
¡Gracias!

Las chicas del Taller Literario donde se gesto HUELLAS
Gracias a todas

Preparando...

Y con Omar... firmándole el ejemplar tan merecido

Familia Kelisek-Madrid amigos del alma

Gon que se animó
Gracias

El negro más bonito del mundo
Lautaro mi hijo
Gracias

¡Una fiesta!
Gracias a todos

Invitación 21 de Febrero 2017

El martes 21 de febrero a las 19: 30 hs los espero en San Telmo.
Barbaremente Fea estará allí con algún texto "poco amable" para endulzar la velada jeje.

No se lo pierdan hay autores maravillosos que ya pertenecen a esta Editorial convocante y otros como yo, que estrenan auditorio.

Los esperamos!!!

Colgado de los pies

Ya desde el título uno tiene derecho a suponer que las cosas en este libro pueden estar un poco trastocadas. Y, en efecto, así es: nada de lo que sucede en Colgado de los pies queda fuera del marco de la realidad pero, por virtud de su autor, ese marco se estira o se retuerce sin piedad y deja entrever dobleces insólitos de la conducta humana. Los personajes de estos cuentos no realizan hazañas descomunales: matan, mueren, rompen a cantar, se erotizan o hasta cacarean. Pero lo hacen de un modo tan inesperado que la muerte y el cacareo resultan cómicos -o terribles- y, a la vez, intensamente perturbadores. Esta cualidad de "lo inesperado", que atraviesa todos los textos, no solo hay que rastrearla en los actos de los personajes; también, y sobre todo, en la escritura de Gerardo Quirós. Un símil de su manera de narrar podría constituirlo el estilo de ciertos actores humoristas, como Groucho Marx, capaces de expresar con rigurosa imperturbabilidad cualquier suceso desopilante. De ahí el efecto que causan. Y de ahí -y de una prosa que es a la vez desenfadada e impecable- la originalidad de Gerardo Quirós y la sorpresa, y el placer inquietante, que provoca la lectura de estos cuentos.

Una miga de pan

Hay una espera amenazada por la taza limpia esta mañana. Despuntan preguntas por el picaporte inmóvil de la casa. El tic-tac inclemente cancela la esperanza. Las manos cruzadas imploran, el estómago ruge, la miga de pan pequeña se vuelve magna, vulnerable emite un último suspiro en el cobijo de la servilleta oscura que la delata.

Corina Vanda Materazzi

Un reloj detenido a las once menos cuarto

Alumbra el cigarrillo entre sus dedos, relampaguea entre sus labios. Un plan agazapado entre los escaques, una idea concentrada en el humo que incita al ataque. Hay sueños que compiten: el de  un  peón que sueña con ser dama, una torre que desea golpear con saña las murallas. Una mano arbitraria a las pretensiones de las piezas se alza, apremiada por la aguja que anuncia el plazo. Los dedos sordos, sin embargo, desatienden las gafas que muestran la mejor jugada.

Corina Vanda Materazzi